- 2 noviembre, 2025
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¿Y ahora, qué sigue?
Calumniando
columnaocho@gmail.com
Mexicali.- El cruel ataque que fue víctima el alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo, es un lamentable reflejo, por lo que hoy transita México.
Alejémonos de lo político, para que esto no se vaya a confundir.
Manzo, en su momento, denunció y señaló la operación del crimen organizado en su ciudad.
A como pudo los enfrentó.
Solicitó apoyo del Gobierno Federal, y lamentable en el marco de Día de Muerto, fue asesinado a balazos.
¿Qué tan grande será el poder del crimen organizado en México, que el Estado no lo puede neutralizar, controlar o acabar?
¿Las organizaciones criminales, realmente son tan poderosas?
Estudiosos, analistas y especialistas afirman que la operación del crimen organizado no podría darse sin la coadyuvancia y/o tolerancia de las autoridades.
¿Será cierto, o es simple retórica?
En Baja California, o en Mexicali, se hace lo suficiente para que los ciudadanos vivan en paz.
¿A alguien le interesa?
¿O todo es mera simulación?
Las matemáticas y la estadística son muy exactas, y no mienten; podría haber un descenso en la incidencia delictiva, pero, ¿por qué, los ciudadanos bajacalifornianos se sienten inseguros, temerosos o incrédulos?
La pregunta del millón:
¿Y ahora, qué sigue?
QEPD, Carlos Manzo.
En ocho palabras: Ensenada está incendiada; Ni Batman, ni el Chapulín